Ofrezco esta versión de uno de mis antiguos poemas referidos a estas fiestas:
A los niños sin pesebre, feliz 2012.
A los niños con moscas en los
labios, feliz 2012.
A los niños agarrados a tetas
famélicas, feliz 2012.
A los niños con pesadillas de
sida, feliz 2012.
A las niñas con senos
violados, feliz 2012.
A los niños que juegan con
Kalhasnikov, feliz 2012.
A los niños invisibles,
feliz 2012.
A los que se atreven a
sustituir a dios por el Amor, feliz 2012.
En tu último verso está la clave para que todos esos niños a los que te refieres en los versos anteriores tengan un feliz 2012 y un FUTURO más feliz. Solo hay que sustituir a dios por el Amor. Sería tan sencillo...
ResponderEliminarAlondra.
Creo que demasiada gente busca a dios donde me parece que no está. De todos modos digo esto con el mayor respeto hacia quien opine, sienta o crea de otro modo, si al final todos comprendemos que lo que importa es opinar, sentir o creer que los demás sí importan.
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